Nacional AP 02/06/2024

CCOO y UGT tienen unos 80.000 “delegados fantasma” que no ejercen ninguna función

Simplemente cobran su nómina y engordan la representatividad para que los sindicatos reciban más dinero público

Vaya rostro que tienen los comegambas

Simplemente cobran su nómina y engordan la representatividad para que los sindicatos reciban más dinero público

Vaya rostro que tienen los comegambas. El Ministerio de Trabajo se niega a eliminar «de oficio» hasta 80.000 delegados fantasma que sirven a las dos grandes centrales sindicales para ejercer en exclusiva la portavocía de la clase trabajadora ante el gobierno y la patronal. ¡80.000 que no hacen nada!

La CSIF (Central Sindical Independiente de Funcionarios) ha revelado en una reciente denuncia que a los efectos de cobrar subvenciones y también a la hora de la representación en el llamado «diálogo social» CCOO y UGT tienen en nómina un gran número de delegados inexistentes, es decir, delegados fantasma.

 Los delegados fantasma aquellos que aún ostentan la condición de representantes de trabajadores en empresas que han cerrado o ya no trabajan en ellas, y que entre otras cosas condicionan la cuantía de las subvenciones que reciben las organizaciones sindicales a las que pertenecen.

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El truco de esta sobre representación se obtiene mediante los registros de representantes sindicales, que como se actualizan cada cuatro años, consigue una horquilla suficiente para manipular los datos de representatividad. ¡Pero vaya rostro tienen!

Año tras año, el Ministerio de Trabajo autoriza la convocatoria de subvenciones a las organizaciones sindicales «en proporción a su representatividad, según los resultados globales obtenidos en elecciones sindicales legalmente convocadas, por la realización de actividades de carácter sindical». Este año, la partida es de 17 millones de euros. ¡Una barbaridad!

 En cuanto al reparto de 2023, cuando se autorizó una subvención idéntica, CCOO recibió 6,4 millones de euros frente a los 5,8 de UGT, prácticamente el 72 % del total. USO, por su parte, apenas obtuvo 735.000 euros, seguido de CSIF (684.000 euros) y ELA (553.000). En definitiva, los comegambas tienen más cara que espalda.

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