El IPC escala al 3,2% en marzo y el precio de los alimentos modera su crecimiento al 4,3%
La inflación subyacente, que excluye alimentos no elaborados ni productos energéticos, bajó dos décimas en marzo, situándose en el 3,3%, una décima superior a la del IPC general
El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 0,8% en marzo respecto al mes anterior y elevó cuatro décimas su tasa interanual, hasta el 3,2%. Este incremento se debe al encarecimiento de la electricidad debido a la subida del IVA de la luz, así como al aumento en los precios de los carburantes y los paquetes turísticos, que coincidieron con la celebración de la Semana Santa. Estos datos fueron confirmados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por otro lado, el precio de los alimentos y bebidas no alcohólicas moderó su avance interanual al 4,3% en marzo. Esto representa un punto menos que en febrero y es la menor alza desde noviembre de 2021. La bajada de los precios de legumbres, hortalizas y otros productos alimenticios contribuyó a esta moderación, así como la subida de los precios de la carne, aunque en menor medida que en marzo de 2023.
En resumen, el IPC vuelve a registrar ascensos después del retroceso experimentado en febrero, situándose en su nivel más bajo desde agosto de 2023. Además, este repunte devuelve al IPC a tasas superiores al 3%, tras haber bajado de esa cota en febrero.
El Ministerio de Economía destaca que el “ligero” incremento en el IPC de marzo se debe principalmente a la normalización del IVA de la electricidad, que durante casi tres años se había aplicado con un IVA reducido.
Asimismo, se resalta especialmente la moderación del precio de los alimentos, cuya tasa ha disminuido más de 12 puntos en el último año. En términos mensuales (marzo sobre febrero), el IPC aumentó un 0,8% debido al encarecimiento de la electricidad, los precios de las gasolinas, los servicios de alojamiento, la restauración, los paquetes turísticos y el vestido y el calzado por la nueva temporada primavera-verano.
La inflación subyacente, que excluye alimentos no elaborados ni productos energéticos, bajó dos décimas en marzo, situándose en el 3,3%, una décima superior a la del IPC general y la más baja desde febrero de 2022. La diferencia entre la subyacente y la inflación general es la menor desde noviembre de 20221.
En resumen, estos datos reflejan la capacidad de la economía española para compatibilizar el crecimiento económico con una moderación de los precios y el apoyo a los más vulnerables. El poder adquisitivo de las familias y la competitividad de las empresas españolas siguen mejorando.
Comparte en Redes Sociales
Evite la censura de Internet suscribiéndose directamente a nuestro canal de Telegram, Newsletter
Haz tu Donación
Síguenos en Telegram: https://t.me/impactoespananoticias
Whassapt Impacto España: https://chat.whatsapp.com/DkvQU3OzEzz1Ih524CPUd7
Twitter: https://twitter.com/impactoSumustv
Instagram: https://www.instagram.com/impactoespana?r=nametag
YOUTUBE:https://youtube.com/@impactoespananoticias
Odysee: https://odysee.com/@impactoespa%C3%B1anoticias:a
WhatsApp: 635967726
Te puede interesar
El Gobierno controlará todos los pagos por Bizum a partir de 2026
Las ayudas entre familiares serán una «donación» con carga impositiva, Transferencias frecuentes de 50, 200 o 500 euros podrían levantar sospechas si se repiten en el tiempo, al interpretarse como posibles donaciones encubiertas
El bienestar de los españoles cae: alimentos básicos (Huevos, café, vacuno, frutas, etc.) se disparan en 2025
El impacto resulta directo. Las familias reducen consumo. Ajustan menús. Eliminan proteína de calidad. La inflación ya no resulta una cifra técnica. Afecta a la salud, a la alimentación y a la dignidad
España repite como país con más parados de la OCDE
A pesar de que la OCDE alerta de las altas cotizaciones sociales que se pagan en España, la comunista Diaz quiere una nueva subida del SMI
Sánchez nos hace más pobres y dependientes: 379.000 familias más dependen ya del Ingreso Mínimo Vital
El aumento del Ingreso Mínimo Vital revela un país más pobre, con 379.000 personas nuevas que dependen de ayudas para sobrevivir. Un síntoma claro del fracaso económico del Gobierno
Es oficial en el BOE: la reducción de nómina que tendrán millones de españoles a partir del 1 de enero de 2026
Un tributo que implica una contribución adicional de trabajadores y empresas a la Seguridad Social y, por ende, una reducción en la nómina de los empleados
Crítica a las subidas de impuestos del Gobierno de Pedro Sánchez que arruinan a los ciudadanos
Uno de los efectos más preocupantes de esta estrategia fiscal es la erosión progresiva de las clases medias, tradicionalmente el motor económico y social del país