
Una política migratoria suicida: el coste del buenismo de Sánchez desangra las arcas publicas
Las comunidades autónomas, muchas ya al límite, se ven obligadas a asumir la acogida sin medios, mientras los barrios obreros sufren el impacto directo del descontrol: inseguridad, saturación de servicios, tensión vecinal y pérdida de calidad de vida