Aldama recibió documentos reservados del Gobierno de Torres
El viceconsejero de Torres envió expedientes y órdenes de pagos internos a Koldo García. El ex asesor de Ábalos se los reenvió al empresario
Los partidos políticos son las sectas propias de una época sin Dios, que fabrican pasiones colectivas para enardecer a sus adeptos e impedir que se oiga la voz de la justicia y de la verdad
Opinion 03/12/2024 Juan Manuel de Prada, DVConvertido en una flagrante cleptocracia en fase de metástasis, en el partido de Estado se produce, al fin, una dimisión, tras la publicación en ABC de la impresionante exclusiva de Javier Chicote.
Pero, ¡ay!, resulta que el dimisionario –el único político que dimite, con la conformidad y aun el apremio indignado de sus correligionarios– es alguien que no delinquió, que no quiso participar de una corruptela.
Es como si en un partido de fútbol se tuviese que retirar el único jugador que no comete faltas ni increpa al árbitro; o como si en una editorial se descartasen todas las novelas que no contuviesen anacolutos o faltas de ortografía. Se trata de un completo despropósito, propio de un mundo al revés donde se han invertido todas las categorías morales. ¿Cómo es esto posible?
Por supuesto, no se nos escapa que Lobato, aunque se negó a participar del delito que le proponían sus correligionarios (en el delito que, a la postre, acabó cometiéndose igualmente), tampoco lo denunció; pero no se le pueden pedir peras al olmo, ni gestos heroicos a un hombre que forma parte de una junta de ladrones.
Reparemos en la paradoja: un albañal de corrupción como el partido de Estado, cuando necesita purgarse, exige la dimisión del hombre que no se ha manchado, que sus correligionarios no perciben como un mirlo blanco, sino como un ultrajante garbanzo negro del que conviene desprenderse.
A Lobato le ocurre exactamente lo mismo que al protagonista vidente de ‘El país de los ciegos’, el cuento de H. G. Wells, que se las promete muy felices cuando descubre en los Andes una aldea poblada por ciegos y se instala en ella, pensando que será pronto rey; pero acaba descubriendo que, si desea ser aceptado en la aldea, tendrá que resignarse a que le extirpen los ojos.
Simone Weil definía un partido político como «una organización construida de tal modo que ejerce una presión colectiva sobre el pensamiento de cada uno de los seres humanos que son sus miembros».
Se trata de una definición muy atinada (salvo en la consideración de «seres humanos» que otorga a los miembros de los partidos políticos, en exceso optimista o hiperbólica) que igualmente podría aplicarse a las sectas. Pero, ¿acaso los partidos políticos difieren en algo de las sectas?
Los partidos políticos, como las sectas, son organizaciones con una fuerte estructura jerárquica, que recolectan personas adheridas cerrilmente a un sistema de creencias delirantes. Los partidos políticos, como las sectas, ejercen la despersonalización de sus miembros y miembras, a quienes se obliga a acatar servilmente dichas creencias, mediante variadas técnicas ‘persuasivas’: engaño, coerción sicológica, amenazas de ostracismo al disidente, etcétera.
Los partidos políticos, como las sectas, generan una sumisión completa a sus líderes, por lo general psicópatas sin escrúpulos que no admiten discrepancia alguna e imponen sobre sus subordinados prestaciones de la más variada índole (a veces sexuales, a veces económicas, siempre delictivas) que pueden llegar al sacrificio o la inmolación personal.
Y, por supuesto, los partidos políticos, como las sectas, son organizaciones guiadas por un ávido ánimo de lucro, que disimulan con farfollas religiosas o ideológicas para alimento de los incautos que caen en sus redes.
Los partidos políticos, en fin, son las sectas propias de una época sin Dios, que fabrican pasiones colectivas para enardecer a sus adeptos e impedir –como señalaba Weil– que se oiga, ni por un segundo, la voz de la justicia y de la verdad.
Así los miembros y miembras de los partidos políticos se convierten en rebaños de zombis juramentados que expulsan de inmediato a quien osa discrepar del líder, a quien osa disentir de las consignas sectarias, a quien reacciona barteblianamente («Preferiría no hacerlo») cuando se le exige participar en prácticas mafiosas o delictivas; y, entretanto, sus líderes se dedican a defender su hegemonía –según nos explicaba Robert Michels en su célebre «ley de hierro de las oligarquías»– y también, por supuesto, a forrarse.
Pues el ánimo de lucro –y no la defensa de principios ideológicos, como piensan los panolis– es la finalidad primordial (¡qué digo primordial, única!) de los dirigentes de los partidos políticos.
Pero este totalitario ánimo de lucro exige, como también señalaba Michels, una «organización metódica de sus adeptos», de tal modo que nadie ose rechistar, que nadie se desmande, que nadie guarde memoria de la verdad y la justicia.
En los partidos políticos no es que haya más o menos políticos corruptos (aunque, desde luego, la jarca encabezada por el doctor Sánchez es el arca de Noé de la corrupción), sino que los partidos son estructuras oligárquicas concebidas para la rapiña irrestricta, juntas de ladrones a quienes las leyes garantizan la impunidad en el desempeño de sus latrocinios.
Y para formar parte de una junta de ladrones hay que dejar atrás los escrúpulos, los titubeos, los conflictos de conciencia, las palinodias; esto es lo que el pobre Lobato no entendió, tal vez porque no había logrado dimitir por completo de su humanidad.
Ojalá en el momento de su caída resuelva hacer lo mismo que Sansón, cuando se vio encadenado a las columnas del templo y a punto de ser ejecutado: «¡Muera yo con todos los filisteos!». Pero no caerá esa breva; pues todos los miembros y miembras de los partidos políticos son, a la postre, la higuera seca del Evangelio.
¿Conoces algún hecho irregular que quieres que investigue y cuente Impacto España Noticias? Escribe a [email protected]
Comparte en Redes Sociales
Apoya el periodismo independiente y crítico
Evite la censura de Internet suscribiéndose directamente a nuestro canal de Telegram, Newsletter
Haz tu Donación
Síguenos en Telegram: https://t.me/impactoespananoticias
Whassapt Impacto España: https://chat.whatsapp.com/DkvQU3OzEzz1Ih524CPUd7
Twitter: https://twitter.com/impactoSumustv
Instagram: https://www.instagram.com/impactoespana?r=nametag
YOUTUBE:https://youtube.com/@impactoespananoticias
Odysee: https://odysee.com/@impactoespa%C3%B1anoticias:a
WhatsApp: 635967726
El viceconsejero de Torres envió expedientes y órdenes de pagos internos a Koldo García. El ex asesor de Ábalos se los reenvió al empresario
Trump prometió terminar con “la teoría crítica de la raza y la locura transgénero”, así como defender la libertad religiosa y restaurar la libertad de expresión. “Firmaré órdenes ejecutivas para acabar con la mutilación sexual infantil
La cultura de la muerte avanza con Sánchez: este año se han presentado las cifras más altas de eutanasias y abortos
Además adjuntan un informe realizado por un arquitecto donde se contempla que «el proceso de meteorización de las piedras se ha ido acelerando durante los últimos años sin haberse tomado medidas»
"Si no creemos en la libertad de expresión para las personas que despreciamos, no creemos en ella en absoluto" Noam Chomsky
Un beso y felices fiestas, a la espera que Begoña sea feliz a la sombra de Pedro, su Marco Antonio inocente, inmaculado e insoportable. Mejorando a Cleopatra
El canal interno es un instrumento obligatorio, según la ley 2/2023, mediante el cual los trabajadores y otras personas vinculadas a una empresa o administración, pueden comunicar las ilegalidades graves y delitos que conozcan que se cometan en ella
Una treintena de jueces tiene causas abiertas contra la banda sanchista… ¡pero la “culpa” es de ellos, no de los innumerables delitos cometidos por el régimen que dirige Pedro Sánchez!
Lo que eran bulos y fake news de muchos de aquellos etiquetados como negacionistas ahora está alineado con los hechos probados
Políticamente, el gobierno del pueblo sólo puede significar el derecho a la autodeterminación
"Solo lo veían los conspiranoicos", expresaba uno. Y es que el programa tenía unas audiencias que fácilmente quedaban eclipsadas por el programa Horizonte de Iker Jimenez
Uno de los mejores documentales que explica por qué está muriendo tanta gente de forma súbita tras la administración de las supuestas vacunas Covid-19
Lo más sorprendente es que la NOAA, la central encargada de procesar las mediciones para emitir sus informes oficiales, sigue mostrando los datos de temperatura de las estaciones desmanteladas
El Plan 2050 de España, por lo tanto, intenta hacer ver que no comer carne es una idea genial por el bien de tu cuerpo
Durante dos años, el Subcomité Selecto para la Pandemia de Coronavirus ha llevado a cabo la investigación más exhaustiva realizada hasta la fecha: entrevistas y declaraciones de los responsables y gestores, documentos administrativos y farmacéuticos, que cambian radicalmente el relato que teníamos de la pandemia